Turismo
Impacto del trabajo legislativo
Durante la LIX Legislatura fueron aprobadas por las cámaras de diputados y senadores, y publicadas en el Diario Oficial de la Federación dos importantes leyes que en síntesis tienen por objeto impulsar la actividad turística en el país: la devolución del Impuesto al Valor Agregado a las compras que realizan los extranjeros, y la instauración de los fines de semana largos.
a) Devolución del IVA a extranjeros
A nivel internacional, la mayoría de los países desarrollados han implementado políticas para incrementar el número de visitantes extranjeros a sus destinos turísticos, una de ellas es el reembolso del impuesto a la compra de mercancías que hayan adquirido durante su estancia.
La devolución del IVA era uno de los aspectos más demandados por los empresarios del sector turístico, ya que nuestros principales socios comerciales, como Canadá, Estados Unidos, los países de la Unión Europea, y países asiáticos como China y Taiwan tienen establecido este mecanismo. Además, nuestro país, como uno de los principales destinos turísticos en el mundo, al no incorporar este esquema, venía perdiendo competitividad.
El primero de marzo de 2005, la diputada Elizabeth Yañez Robles, por un lado, y los diputados Margarita Martínez López y Héctor Gutiérrez de la Garza, por otro, presentaron iniciativas de ley para adicionar el artículo 31 a la Ley del Impuesto al Valor Agregado, y devolver el importe de las mercancías adquiridas en el país a los extranjeros. Las iniciativas fueron turnadas a las comisiones de Hacienda y de Turismo para su análisis y dictamen.
Estas comisiones organizaron el foro “Incentivos fiscales en el turismo”, que contó con la presencia de legisladores, funcionarios de las Secretarías de Hacienda y de Turismo, y empresarios del sector. En el foro se expresaron voces que coincidieron en los beneficios de la devolución de este impuesto a los extranjeros, tanto para la industria turística como para el sistema nacional de recaudación y las finanzas públicas.
Entre las razones que tuvieron los diputados para aprobar esta Ley, destaca que la devolución de este impuesto a los extranjeros aumentaría el gasto promedio de los turistas y promovería al país en el exterior, al posicionarlo como un mejor destino turístico. Además, coadyuvaría a la regularización y fiscalización de establecimientos minoristas, ya que los comercios que busquen afiliarse a este esquema deberán estar debidamente registrados en el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y al corriente en sus pagos, y favorecería las finanzas públicas pues la medida ayuda a la recaudación. Se generaría una cadena de valor agregado: el turista extranjero prefiere visitar nuestro país que algún otro donde no tenga este incentivo; los comercios se interesan en afiliarse al programa para ofrecer el beneficio y recibir mayor cantidad de clientes; y finalmente la hacienda pública tiene más ingresos.[1]
El artículo 31 de la Ley, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 8 de diciembre de 2005, establece que para devolver el impuesto a los turistas extranjeros que visiten México se requiere: que hayan ingresado por vía aérea o marítima, que retornen al extranjero, que demuestren la calidad migratoria de turista, que los comprobantes fiscales que emitan los comercios reúnan los requisitos del SAT, que las mercancías adquiridas salgan efectivamente del país, y que el monto mínimo de compra en un establecimiento sea de mil 200 pesos.
Los principales actores que vieron satisfecha esta demanda son las organizaciones empresariales turísticas como el Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET), la Confederación Nacional de Empresarios y Prestadores de Servicios Turísticos, la confederación Nacional Turística, la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles, la Asociación Mexicana de Desarrolladores Turísticos y la Confederación Nacional de Cámaras de Comercio.
b) Fines de semana largos
Uno de los aspectos demandados por el sector empresarial del turismo en México solicitado en los 20 puntos que para impulsar la actividad en el país entregó el Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET) al gobierno federal, era la reubicación de algunos días festivos para hacer fines de semana largos. Esta demanda, consensuada al interior de las organizaciones empresariales del ramo, era impulsada con fuerza desde inicios de la administración del Presidente Vicente Fox.[2]
En la LVIII y la LIX Legislaturas se presentaron 3 y 2 iniciativas, respectivamente, con la intención de reformar el artículo 74 de la Ley Federal del Trabajo para modificar los días de descanso obligatorios y reubicar algunos de ellos hacia el inicio de la semana próximo al día festivo. Aunque las iniciativas fueron turnadas a la Comisión de Trabajo y Previsión Social, se requirió la opinión de la Comisión de Turismo al respecto.
Al respecto, los congresos de los estados de Morelos, México, Quintana Roo y Tlaxcala se pronunciaron a favor de impulsar y promover en el país los fines de semana largos y remitieron sus acuerdos a la Cámara Baja del Congreso de la Unión; mientras que el Congreso del Estado de Baja California Sur emitió un acuerdo por el que no se adhería a las propuestas de reforma.
Las modificaciones al artículo 74 de la Ley Federal del Trabajo, aprobadas por las cámaras de diputados y senadores al final del primer periodo ordinario de sesiones del tercer año de ejercicio, y publicadas en el Diario Oficial de la Federación el 17 de enero de 2006, establecen 3 “fines de semana largos”: el primer lunes de febrero en conmemoración del 5 de febrero, el tercer lunes de marzo en conmemoración del 21 de marzo, y el tercer lunes de noviembre en conmemoración del 20 de noviembre. Es pertinente apuntar que se prefirió recorrer el día de descanso al lunes, en lugar del viernes, ya que gran parte de los trabajadores labora los sábados, por lo que se rompería la esencia de esta reforma.
Son tres los beneficios principales que se advierten, en primer lugar, el fomento de la convivencia familiar, ya que al tener la certeza de tres fines de semana largos, las familias podrán planear el descanso o la salida a cualquier destino turístico; en segundo lugar, las empresas podrán verse beneficiadas por eliminar los llamados puentes que tienen lugar cuando el día festivo cae en martes o jueves y los trabajadores se toman el lunes o viernes como día adicional de descanso, perjudicando la productividad laboral; y por último, la generación de una derrama económica adicional por la activación del turismo interno.[3]
Un estudio realizado por la Secretaría de Turismo (Sectur) muestra que en un fin de semana largo la ocupación hotelera se incrementaría considerablemente en los destinos turísticos del país, ya que alrededor del 15% de la población viaja en estos puentes. La derrama económica sería importante, pues el 32.8% gasta entre 4 y 8 mil pesos durante el viaje y el 7.5% gasta 16 mil pesos o más; en promedio, el nivel de gasto en un viaje de fin de semana es de la mitad del ingreso mensual. Por otro lado, el estudio muestra que los fines de semana promueven la convivencia familiar, ya que el 68.8 % viaja con la familia y el 43% viaja con la pareja.[4]
Entre los grupos de interés que ven satisfecha su demanda con la instauración de los fines de semana largos destacan: el Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET), la Confederación Nacional de Empresarios y Prestadores de Servicios Turísticos, la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles, la Confederación Nacional Turística, la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC), la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), La Asociación Mexicana de Agencias de Viaje y los gobiernos de los estados de Morelos, México, Guerrero y Quintana Roo.
Sin embargo, es pertinente señalar que algunos sectores no recibieron con beneplácito esta medida, ya que podrían generar abusos y pugnas entre los sindicatos y las empresas. Asesores laborales de la Canacintra, de la Coparmex y de la Cámara Americana de Comercio coincidieron en señalar que la medida era improductiva y perjudica la rentabilidad de las empresas al tener que pagar pagos por jornadas dobles o triples, ya que es diferente el día de descanso obligatorio que el día feriado, el cual no se modificó.[5] En ese sentido se pronunciaron los líderes de la Unión Nacional de Trabajadores, del Sindicato del IMSS y del Sindicato Mexicano de Electricistas, quienes descartaron ajustar los días de descanso.[6]
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[1] “Dictamen de las Comisiones Unidas de Hacienda y Crédito Público, y de Turismo, con proyecto de decreto que adiciona el artículo 31 a la Ley del Impuesto al Valor Agregado”, Gaceta Parlamentaria de la Cámara de Diputados, 7 de septiembre de 2005.
[2] Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública, " Temas en la agenda nacional ", en Turismo [Actualización: 5 de junio de 2006], en www.diputados.gob.mx/cesop/
[3] “Dictamen de la Comisión de Trabajo y Previsión Social, con proyecto de decreto que reforma el artículo 74 de la Ley Federal de Trabajo”, Gaceta Parlamentaria de la Cámara de Diputados, 13 de diciembre de 2005.
[4] Secretaría de Turismo, “Viajes de placer de corta duración”, abril de 2006, en www. sectur.gob.mx (consulta: 25 de mayo de 2006)
[5] “Generan confusión los días feriados”, Reforma, enero 10, 2006, en www.reforma.com (consulta: 15 de mayo de 2006)
[6] “Desacatan sindicatos cambios a días feriados”, Reforma, enero 11, 2006, en www. reforma.com (consulta: 15 de mayo de 2006)
[Citar como] Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública, "Impacto del trabajo legislativo", en Turismo [Actualización: 5 de junio de 2006], en www.diputados.gob.mx/cesop/